La Dirección de Transporte, dependiente de la Dirección General de Tránsito de la Municipalidad de Resistencia, llevó adelante un exhaustivo control de alcoholemia en el centro de la ciudad. Esta vez, fueron inspeccionados unidades de colectivos, remises, taxis, trafic y camiones.
Este viernes el municipio puso en marcha el nuevo sistema de inspecciones al transporte en la ciudad. Si bien no se detectó choferes con alcoholemia positiva, hubo tres remises, un taxi y una trafic de transporte interjurisdiccional, trasladados al corralón por tener habilitación y revisión técnica vencidas.
El flamante sistema de controles implementado por el gobierno municipal tiene como objetivo mejorar las condiciones de seguridad para los pasajeros y usuarios de medios de transporte.
Desde Tránsito y Transporte informaron que, en el caso que se detecte conductores (choferes) con licencia profesional, la sanción implica una multa equivalente a 1.000 litros de nafta súper según lo dispuesto en el Código de Faltas Municipal (ordenanza 1130).
Además, se procederá a la retención preventiva de la licencia de conducir con la confección de una multa denominada Boleta del Inculpado.
Dicho documento habilitará al inculpado a conducir solo por un plazo máximo de 30 días de corridos, dando cumplimiento el artículo 72 bis de la Ley Nacional de Tránsito 24.449 y su adhesión de la Ley Provincial 4.448.
El director de Transporte, Héctor Enrique, explicó que los controles alcanzan también a conductores profesionales de vehículos utilitarios de transporte escolar, taxistas y remiseros.
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