El conflicto sigue, pero hay tres propuestas que podrían llevar a una salida a mediano plazo.
Hoy se cumplen 150 días desde la última vez que un colectivo de la empresa Expreso Lomas llevó pasajeros a bordo. A cinco meses de que estallara el escándalo, que venía siendo denunciado por los trabajadores desde años atrás, todo lo que queda de la 165 son un puñado de unidades en cuestionable estado, 400 familias desesperadas por recuperar su fuente de ingresos, 50 mil usuarios afectados y la esperanza de que el conflicto se destrabe pronto para volver con el servicio a las calles.
Según pudo saber El Diario Sur, hay tres propuestas que serán analizadas por la secretaría de Transporte y el Juzgado N°14 en lo Civil y Comercial de Lomas de Zamora.
Por un lado la empresa San Vicente solamente buscaría absorber el personal pero no se haría cargo de las líneas 112, 165 y 243. Después, la empresa José María Ezeiza propuso junto a la Línea 17 S.A conformar una UTE (Unión Transitoria de Empresas) para tomar el control de las tres líneas, pero no de la totalidad de los trabajadores. Por último, la empresa Autobuses Santa Fe se habría propuesto para hacerse cargo tanto de las líneas y sus recorridos como de todo el personal que quedó a la deriva.
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