Se estima que en su primer año de operación, esta flota permitirá reducir 21.900 toneladas de CO2 y 526 kilogramos de las peligrosas partículas PM2.5. También serán un 60% más baratos a nivel operativo, consumos y mantenimientos, en comparación con los autobuses tradicionales diésel.
Una BYD que está logrando hacerse un hueco importante en la región, contando con pedidos de mercados como Ecuador, Chile, Brasil, Perú, Panamá, Uruguay y Argentina. Algo que permite a los chinos que sus autobuses y taxis eléctricos ya estén presentes en más de 300 ciudades y 50 países diferentes.
Estos autobuses son capaces de transportar hasta 38 personas cada uno, y vienen equipados con la última tecnología en baterías de BYD, que permite una autonomía de más de 250 km con una sola carga. Cabe destacar que en el interior de estos autobuses los pasajeros contarán con comodidades como aire acondicionado, conexiones USB para cargar dispositivos móviles y conexión Wi-Fi.
Fuente: